El Rocasa Gran Canaria afronta mañana sábado uno de los partidos más decisivos de la temporada. La Ciudad Deportiva de Carranque (Málaga) será el escenario, a partir de las 18:30 h (hora canaria), del encuentro de vuelta de los cuartos de final del play-off por el título de la Liga Guerreras Iberdrola. La emoción está servida.
Las grancanarias viajan con una ligera ventaja tras el triunfo (21-20) conseguido el pasado miércoles en el Pabellón Insular Antonio Moreno, un partido que dejó claro que la eliminatoria está totalmente abierta y que cualquier detalle puede decantar la balanza.
El ambiente vivido en Telde fue digno de una gran cita, con más de 400 aficionados empujando a las suyas desde la grada. El Rocasa mostró carácter, valentía y un balonmano muy sólido durante gran parte del choque, llegando a disponer de rentas de hasta 3 y 4 goles de diferencia. Sin embargo, el Costa del Sol Málaga supo rehacerse y mantener la eliminatoria viva, dejando todo pendiente para este segundo asalto.
Ahora, la afición grancanaria tendrá que seguir a su equipo desde la distancia, confiando en que las pupilas de Carlos Herrera sean capaces de dar la gran campanada. No es un reto sencillo, pero tampoco es nuevo para este grupo. El Rocasa ya ha demostrado en más de una ocasión su capacidad para competir en los escenarios más difíciles, y mañana tendrá una nueva oportunidad para reafirmarlo.
El Costa del Sol Málaga, segundo clasificado en la liga regular, parte como favorito, pero las sensaciones que dejó el Rocasa en el partido de ida invitan a creer. La clave volverá a estar en mantener la máxima concentración durante los 60 minutos, algo que Carlos Herrera ha insistido en toda la preparación de esta semana. La defensa, una de las grandes señas de identidad del Rocasa esta temporada, será determinante, y ahí el equipo cuenta con un seguro bajo palos: Lulu Guerra y Silvia Navarro firmaron un partido brillante el pasado miércoles, y su papel volverá a ser crucial.
La historia reciente también respalda la igualdad entre ambos conjuntos. Esta temporada ya se han medido en tres ocasiones: una victoria para cada uno en la liga regular (29-23 para el Málaga y empate 21-21 en la vuelta) y el ajustado triunfo del Rocasa en este primer envite de cuartos de final. La rivalidad está servida y el espectáculo garantizado.
Carlos Herrera, técnico del Rocasa Gran Canaria, destacaba en la previa: “Viajamos con toda la intención del mundo y la ilusión a Málaga. Sabemos de la igualdad máxima que hay entre los dos equipos. Cualquiera puede pasar a la siguiente ronda. Su afición va a apretar mucho, será un ambiente de mucho ruido y ánimo para ellas. Pero dentro de la pista, cada equipo defenderá lo suyo. Esperemos que salga a favor nuestra”.
También la capitana Mela Falcón quiso compartir sus impresiones: “Sabemos el ambiente que nos vamos a encontrar. Incluso en épocas anteriores, junto a otras jugadoras en el club, ya lo hemos vivido. Será muy bonito. Hay muchas ganas de poder pasar a la siguiente ronda en estos play-off; queremos hacerlo bien”.
El equipo viaja mentalizado y con la ambición de seguir haciendo historia. Quedan solo 60 minutos por delante para definir el desenlace. Un partido para valientes, donde solo hay espacio para la lucha, el esfuerzo y la fe. El Rocasa Gran Canaria quiere soñar y, para eso, deberá dejarse la piel sobre la pista. El encuentro estará dirigido por los colegiados José Manuel Iniesta Castillo y Alberto García Rodríguez.
